jueves, 25 de octubre de 2007

Bailando salsa

El fin de semana pasado salí con unas amigas con las que no salía a tomar aire creo que hace un par de años, si bien las veo por lo menos fijo un par de veces al año, para los infaltables cumpleaños de los hijos, allí entre pisco sour, gritos infantiles, la piñata, el ponerse al día en las diversas historias y cuanta cosa adorna dichas celebraciones, no nos habíamos dado el tiempo para organizar alguna salida.
El caso es que después una coordinación de la salida bastante inesperada y de esperarlas un rato bebiendo una cerveza helada llegaron las locas (expresión acuñada por una de mis partner para referirse a esta facción del grupo), nos pusimos a actualizar los últimos hechos acaecidos en nuestras vidas. Nos dimos unas vueltas por algún cumpleaños y finalmente después de que la noche parecía terminar, nos encaminamos a una salsoteca!... Quienes bien me conocen saben que hay algunos ritmos que están más menos abajo en mi lista de prioridades... pero al entrar al local mi ánimo cambió, todo el mundo era feliz y buena onda (sospechoso a esa hora), a nadie le importaba si bailabas o no, asi que termine bailando totalmente engrupida hasta que cerraron el local... y nos fuimos para la casa. Y bueno ahora que estoy absolutamente engrupida de que sí bailo, capaz que termine saliendo nuevamente con las locas y dandome vueltas por alguna salsoteca.

2 comentarios:

Lilian Flores Guerra dijo...

Me habría gustado ver eso de la Paz engrupida bailando salsa. Te atreverás con un perreo? mira que es requisito casi indispensable para darse una vuelta por Pichilemu y conocer dioses griegos caídos a la tierra por error.

Pazchina dijo...

Uf! no se si dará para tanto la engrupida... hay cosas que son realmente superiores a mi...tendrian q haber muuy buenas razones para reconsiderar