jueves, 2 de agosto de 2007

Redondo


El aroma a tu piel me llega a jirones a traves el viento.
Y la brisa del atardecer traía voces y recuerdos frescos
de aquellas tardes iluminadas.

Nuevamente desperté a mis sueños y volví a mí.
A soñar despierta con mundos nuevos y
atardeceres redondeados.

1 comentario:

Lilian Flores Guerra dijo...

Querida, cuándo escribió esta esférica ensoñación? porque ayer miré tu blog y no estaba...